Post by ¤ Shabu ¤ on Jul 22, 2007 19:58:45 GMT -3
Summary: : Vos sabes que la vida es corta, no importa lo que suceda siempre tendrás aquí a alguien para ti, nunca voy a dejarte, despiértame con un beso cuando septiembre termine : MirSan : One Shot : Reviews Onegai:
Kind for the Fan Fic: : Romace / Drama :
Author: :Chibi-Lust :
Disclaimer: : Los personajes de Inu Yasha no me pertenecen : Pertenecen a la gran mangaka Rumiko Takahashi :
Based in: : “Wake me up when septembers ends” : Canción del Grupo : “Geen Day” :
Explanation for the F/F: : - ‘Diálogo’ – :
: ’Pensamientos’ :
: ‘Parte hablada en una sola persona’ :
: (Aclaraciones de la autora dentro de la historia) :
: ‘Palabras que deben resaltar’ :
: .-.-.-.-.-. Indica cambio de escena .-.-.-.-.-. :
Brief introduction: : Año 2003, mes segundo, Febrero, día 20, pleno verano... Inicios de la guerra de Estados Unidos e Irak... Pleno comienzo de las miles de planificaciones militares para atacar a la pequeña república del suroeste de Asia... Principio de aquellos aterradores preparativos... :
: Este es el terrible momento en el que el Fan Fic se posiciona... Supongo que una de las dudas será... “Acaso Miroku y Sango no son japoneses?... Que tienen que ver con Estados Unidos?”... Pues eh aquí la verdadera introducción y la posible respuesta a las diversas preguntas que pueden hacerse luego de leer el fic o antes. :
: “El día 10 de Septiembre de 1996 este par de adolescentes (Sango de 13 años y Miroku de 16) decide declarar sus sentimientos por el otro y así formalizar una relación. Siete años más tarde, el 2 de Febrero del 2003, el padre de Sango es trasladado, por una cuestión de trabajo, a la ciudad Nueva York (New York), Estados Unidos (El trabajo del padre de Sango es el de contador / ejecutivo de una gran empresa... La cual es trasladada a los Estados Unidos de América, y, eh ahí la razón de la mudanza, para ser más explícitos)... Con algo de tristeza la pareja asume su pronta separación. :
: El día del vuelo, Sango encuentra a Miroku esperándola en el aeropuerto junto a algunas maletas, dándole la noticia de que se iría con ella... Ahora, 27 días después, viven felices allí en Nueva York... Para este momento Sango tendría 20 años y Miroku 23” :
: Bueno, esta es una pequeña introducción, ahora, paso a explicar la manera en la que haré el Fan Fic... :
: Este se partirá como en pequeños capítulos iniciando por la fecha en la que transcurre y terminará con una pequeña frase :
: Estos capitulitos (Si así podemos llamarlos) serán muy breves y solo dirán lo más importante del día o el momento más bello de este, no será un día completo ni nada por el estilo, solo un momento :
Apology: : Quisiera disculparme por la notoria diferencia de personalidades o el cambio / modificación que hay en ellas... También por la única participación de Sango y Miroku en el fic, ya que ningún otro personaje interviene en la historia, no de la serie ‘Inu Yasha’ al menos... Solo espero que esto no afecte el resultado de este Fan Fic y que sea de su agrado... :
: También me disculpare si es que la traducción en inglés (La que aparecerá más a bajo, luego del título) esta mal... :
: Sé bien que en ‘Febrero’, en Estados Unidos, es invierno y yo lo hago verano, disculpen esto pero me gustó mucho más esa idea... jeje :
: Por otro lado, en realidad el ataque a las torres gemelas fue efectuado en el año 2001, aún así (por temas de no investigar mejor, confusión, etc.) la historia transcurre en el 2003 :
: Hay un momento referido a "Cumple mes" de Sango y Miroku, si bien su relación en este fic tiene un tiempo más extenso, con ese 'mes' me refiero al tiempo de ellosvivido en EEUU :
: Hay un segmento del video que no he reproducido en el fan fic, "El cumpleaños del muchacho", a decir verdad en el video es muy breve y aqui no sabia como expresar la idea :
: Ahora si, disculpas por todos los incomvenientes y horrores (ya no son errores, jeje ) :
: 20 de Febrero del 2001... :
Una mañana, en un amplio campo de hierbas verdes cubierto por hermosas y amarillentas margaritas, con árboles distantes, rodeado de frondosas montañas que se disipaban levemente a la lejanía, dejando que el sol lo ilumine con intensidad y calidez en aquel despejado día de cielo azul, dos jóvenes enamorados se encontraban juntos, besándose...
Entre besos y dulces palabras se toman unos segundos, se separan un instante sonrientes, la muchacha, de intensos y brillantes ojos cafés siendo acompañada por un suave y hermoso cabello castaño, se recuesta sobre su acompañante, un joven de ojos azulinos, hermosos y profundos como dos zafiros, de cabellera azabache, suave y delicada, atada con una diminuta coleta blanca...
Ambos, tendidos sobre el mullido y verde césped, contemplaban el paisaje al tiempo que la compañía que el otro le hacía...
- ‘Sabes...?’ – Se anima a decir el joven ojiazul mientras sus ojos brillaban con intensidad observando el amplio y celestino cielo sobre él – ‘...La vida es una sola... Y no dura para siempre, lamentablemente... Vos sabes que la vida es corta’
- ‘Eh?... Que dices?... A que viene eso?’ – Dice la joven girando a ver al azabachado, algo confundida por la repentina oración que el muchacho acababa de pronunciar
- ‘Que quiero estar lo que me quede de vida contigo y con nadie más... Solo... Solo contigo...’ – Agrega el muchacho mirando a la castaña a los ojos, quitándole aquella confusión y otorgándole una sonrisa
- ‘Jajaja’ – Ríe la joven para luego acomodarse, ayudándose con sus manos y piernas para girar, y quedar frente a frente al chico – ‘Pase lo que pase yo siempre estaré contigo, nunca te dejaré’
- ‘Me lo aseguras?’ – Pregunta el joven posando su mentón en el hombro izquierdo de la muchacha para luego suspirar cerrando sus ojos – ‘Dime que sí...’
- ‘Por su puesto, no importa lo que suceda siempre tendrás aquí a alguien para ti, nunca voy a dejarte’ – Dice la castaña separando el rostro del chico de su hombro y depositando un beso en lo labios del joven, este era suave, pacífico e inocente, muy tierno y cálido...
Luego de unos instantes se separa del ojiazul y lo mira a los ojos con una tierna sonrisa en sus labios... Luego de esa breve conversación volvieron a la antigua posición...
Así comenzó a pasar el tiempo, haciendo que el día avance, tranquilo y sereno, cálido y suave... Ahora era de tarde, ambos jóvenes recostados en el gran y rojizo pastizal...
El muchacho recostado de espaldas al sol, con sus ojos cerrados, descansando, sosteniendo a la indefensa castaña en sus brazos, rodeándola con ellos... Esta de espalda al joven, tomaba aquella manos que la rodeaban en las suyas, también con los ojos cerrados... Y el cabello cayendo con densidad y delicadeza por su cuello, cubriéndolo por completo...
- ‘Amor...’ – Pronuncia el chico de ojos azules con pereza luego de un bostezo, para levantar la cabeza densamente y asomar su mirada por los hombros de la joven para ver su rostro...
- ‘Sí...?’ – Pregunta la castaña en el mismo tono de voz adormilada, mientras una densa pero hermosa sonrisa se dibujaba en su rostro
- ‘No crees que ya debemos irnos?... Digo... Dentro de poco comenzará a anochecer...’ – Opina el joven viendo como el sol se ocultaba tras las montañas matizando, poniendo todo aquel bello campo en cálidos tonos de naranjas, rojos y amarillos
La castaña voltea para mirar fijamente a los ojos al ojiazul, en los cual, notó un hermoso brillo anaranjado debido a la caída del sol, su figura era enmarcada débilmente de un claro color naranja, el cual también jugaba en su cabello, comenzaba a oírse a los grillos entonar su conocida melodía... La chica solo sonríe, se empalagaba con aquella visión que tenía enfrente... Todo el fondo de un negro rojizo, con el ojiazul de un anaranjado oscuro delineado con uno más claro, más el intenso brillo naranja en sus ojos el cual resaltaba el color zafiro que estos llevaban...
- ‘Si’ – Susurra, luego se acerca y lo besa, yergue la parte superior de su cuerpo y queda sentada en la hierba, con sus rodillas a un lado sirviéndole de apoyo, mirando al ojiazul... Esperando que se levantara...
El joven suspiro con una sonrisa en el rostro, luego se puso de pie, estirándose, desperezándose... Luego se puso de frente a la castaña extendiéndole la mano derecha...
La muchacha de ojos cafés, tomó la mano del ojiazul, y estirando sus piernas por completo, se pone de pie quedando a centímetros del rostro del joven que estaba frente a ella...
Solo sonríe y susurra con dulzura...
- ‘Te amo...’ – Acercándose a los labios del chico para besarlo con suavidad y ternura, el chico cierra los ojos disfrutando de aquella apacible opresión de labios que la castaña le estaba regalando...
La chica se separa sonriente, dejando ver sus blanquecinos dientes asomarse por sus rosados y delicados labios...
- ‘Yo también te amo... Mucho... Demasiado...’ – Dice el muchacho de ojos de zafiro pasando su brazo por encima de los de la castaña haciendo que esta se pose su cabeza en el hombro de él... Así comienzan a caminar... Juntos...
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: Vos sabes que la vida es corta :
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: 21 de Febrero del 2003... :
Una joven castaña corría, riendo, con una hermosa sonrisa y sus ojos brillosos, un gran semblante...
- ‘Espérame!’ – Suplicaba entre risas un ojiazul que corría tras ella, mirándola expectante...
- ‘Jajaja, corre!’ – Dice la chica volviendo su rostro hacia tras parar mirar el del ojiazul y luego volver a su posición anterior apresurándose tanto como sus pies le permitían – ‘Voy a ganar!’ – Canta victoriosa al ver que la meta se encontraba cerca y que llevaba la delantera
- ‘Lo dudo!’ – Se apresuró a añadir el ojiazul al tiempo que aumentaba la velocidad con la que corría, esforzándose minimamente pero cansándose... Alcanzaba lentamente a la dulce castaña y luego pasa delante de ella
- ‘Que!’ – Fue lo único que salió de los labios de la chica al ver la manera en que su novio la había alcanzado...
El joven mira hacia atrás sin dejar de correr, dedicando una sonrisa a aquella castaña... La chica parpadea... El muchacho se detiene... Acto seguido la joven lo imita...
- ‘Como... Como hiciste?’ – Pregunta sentándose en aquellas grisáceas sillas de la mesa redonda perteneciente a ese bar al aire libre, recuperando el aire, aún sin poder creer que le habían ganado
- ‘Corrí... Como me aconsejaste’ – Responde con una hermosa sonrisa en el rostro tomando asiento
- ‘Que gracioso’ – Dice la muchacha riendo
- ‘Aja, aja’ – Dice el sonriente ojiazul al tiempo que fija su vista en una joven de cabello azulado y ojos grisáceos, que se acercaba a la mesa
- ‘Buenas tardes’ – Saluda la jovencita inclinando su cabeza con levedad ante la pareja allí sentada – ‘Desean ordenar algo?’ – Pregunta con amabilidad
- ‘Mnh... Bueno, yo quisiera un pequeño paquete de papas y una gaseosa’ – Pide el ojiazul con una radiante sonrisa para luego mirar a su castaña – ‘Tu amor...?’
- ‘Yo... Emh... Lo mismo, solo que con agua mineral si se puede’ – Dice la ojicafé mirando a la amable mesera con un leve rubor en las mejillas...
- ‘Muy bien, enseguida se los traigo’ – Pronuncia la joven ojigris con una dulce sonrisa para luego darse la vuelta e ir en dirección al bar
- ‘Mmm... Estas... Sonrojada?’ – pregunta el muchacho e cabellos azabaches una vez que vuelve a fijar su vista en la castaña, dueña de su corazón, y notar que sus mejillas estaban teñidas de un leve color rojo
- ‘Y-Yo?’ – Titubea la joven para luego bajar la mirada y acercar su mano izquierda a su mejilla – ‘Bueno, si, puede ser...’
- ‘Eh, no me asustes...’ – Suplica el chico mientras una incrédula sonrisa se formaba en su rostro pensando lo peor...
- ‘NO!... No es lo que estas pensando!... E-Es solo que me apena un poco hablar frente a alguien que no conozco...’ – Confiesa la chica mientras sus mejillas tonificaban ese rojizo color que las adornaba
- ‘Jajaja’ – Ríe el ojiazul, y luego se arriba a la mesa para poder llegar a la castaña para acariciarle la mejilla y seguir con un tierno beso en sus labios... A lo que la castaña corresponde...
- ‘D-Disculpen...’ – Dice la dudosa voz de una joven, la cual interrumpe a la pareja provocando la rotura de aquel beso deshaciendo el cálido clima – ‘Aquí están sus pedidos...’ – Pronuncia con debilidad mientras sus manos comenzaban a temblar haciendo que la bandeja que llevaban en ellas las imitara
- ‘ Ah, muchas gracias’ – Responde el azabachado volviéndose a su sitio dejando a una apenada castaña con su mirada fija en sus rodillas – ‘No se preocupe, tranquilícese...’ – Pide el ojiazul observando el nerviosismo de la muchacha
- ‘Si, gracias... Disculpe...’ – Ruega la joven quien se reverencia y luego posa la bandeja la bandeja sobre la mesa para después retirarse
Ambos comienzan a almorzar, entre tanto, platicaban y reían... Disfrutaban demasiado estar juntos, era una especie de adicción... La sonrisa del otro, su mirada, su voz... Su calidez... Todo era indispensable... Talvez demasiado...
En cuando terminaron colocaron los restos en la bandeja y la acercaron al bar donde la apoyaron sobre la pequeña barra roja que allí estaba... Pidieron la cuenta y esperaron unos segundo a que se las dieran...
- ‘Entonces...’ – Dice un ojicafé que miraba atenta aquel papel blanco lleno de cortas letras en forma de lista seguidas de números...
- ‘Serían 9, 50’ – Concluye el hombre que atendía la caja
- ‘Muy bien’ – Dice la muchacha sacando dos billetes de dos dólares con tres monedas de 25 centavos... – ‘Aquí esta mi parte señor...’ – Pronuncia extendiendo la mano para entregarle el dinero al hombre frente a ella del otro lado de la barra
- ‘Gracias jovencita’ – Dice el hombre tomando el dinero
Mientras esto sucedía el ojiazul buscaba desesperado su billetera, la castaña y el hombre lo miraban intrigados...
- ‘Sucede algo joven?’ – Preguntó el hombre acercándose a donde el azabachado estaba
- ‘Eh... Bueno... N-No encuentro mi billetera...’ – Dice el muchacho encogiéndose de hombros para esconderse un poco
- ‘Mph...’ – Se quejó el hombre de manera silenciosa mientras fruncía el entrecejo
- ‘Ah... Eh...’ – Pronunció la castaña mientras revolvía nuevamente su bolsillo – ‘Aquí tiene señor, disculpe las molestias’ – Se disculpa con una amplia y tierna sonrisa mientras hacia una pequeña reverencia, el hombre ante esta actitud, le sonríe a la castaña y luego toma el dinero
- ‘No te preocupes, no es nada... Muchas gracias’ – Culmina guardando el dinero en la caja, luego de despedirse la castaña toma al, aún, impactado ojiazul del brazo y comienza a caminar
- ‘Gracias... Perdona por no llevar la billetera...’ – Se disculpa el avergonzado muchacho
- ‘Por mí esta bien’ – Opina la castaña pegando su rostro al hombro del chico – ‘Si es por ti... Por mí esta bien...’
: 22 de Febrero del 2003 :
Era una noche despejada, al luna brillaba en todo su esplendor iluminando con vaguesa y un claro color azulino todo lo que alcanzaba...
Solo en un patio su brillo no surgía efecto, unas amarillentas y fuertes luces lo iluminaban resaltando todo color vivo que había allí, un lento humo era despedido por la garganta de una ancha parrilla donde abundante carne se asaba...
Las personas allí presentes hablaban animadamente, riendo y alborotando cada palabra que pronunciaban, haciendo a aquel lugar mucho más vivo en la oscura, despejada y tranquila noche...
Mientras esto sucedía dos jóvenes se encontraban dentro, escapando del murmullo...
- ‘Suelta esa cosaaa!...’ – Pedía una aburrida castaña pataleando, mientras su espalda se recostaba en el suelo dejando sus brazos a los lados de este
- ‘Espera, espera! Un nivel más, solo uno más!’ – Decía un adicto ojiazul mientras tecleaba con fuerza los pequeños botoncitos del joystick que llevaba en las manos, acompañando con su cuerpo los movimientos que realizaba el videojuego
- ‘Eso me estás diciendo hace una hora!’ – Responde la harta joven irguiendo su espalda para quedar sentada en el suelo
- ‘Tenme paciencia! Ya va, ya va!’ – Titubea el concentrado azabachado mientras oprimía sus ojos
La castaña suspira con enojo para luego sentarse frente al televisor con decisión y posar su dedo en el botón de encendido/apagado del el televisor
- ‘NO!’ – Grita con desesperación el ojiazul poniendo el juego en pausa – ‘No lo hagas! Por favor no!’ – Suplica extendiendo la mano derecha en dirección a la joven
- ‘Entonces ya basta!’ – Ordena la ojicafé mirándolo fijamente a los ojos
- ‘Emh...’ – Dudaba el ojiazul
- ‘Argh...’ – Refunfuña la joven conteniendo sus nervios, luego se pone de pie y mira al ojiazul, para acaparar sus atención y hacer que este la desvíe del televisor...
En cuanto logra su objetivo, con un ágil maniobra de la mano derecha, oprime el botón de encendido/apagado del televisor...
El ojiazul no nota de inmediato y mira la TV boquiabierto... Luego toma el control remoto, el juego no estaba apagado, por lo tanto seguía funcionando...
En cuanto lo toma en sus manos la castaña se agacha junto a la consola y la apaga, dejando al ojiazul mirándola anonadado... Ella le sonríe con orgullo... El azabachado suspira resignado y luego le sonríe a la castaña...
Camina con las rodillas hasta la dueña de su corazón y la abraza juguetón para luego besarla... A lo que la castaña corresponde con felicidad...
Así comenzaron a embelesarse, mimándose y besándose... Hasta que la muchacha rompe el extasiado beso para mirar al joven a los ojos...
- ‘Creí que me cambiarias por eso...’ – Susurra señalando a la gris y silenciosa consola que estaba en el suelo apoyada...
- ‘Jamás haría eso’ – Responde con dulzura plantando un seco pero tierno beso en los labios de la castaña
Ella solo ríe y luego se acurruca más en el ojiazul rodeando su cuello con sus brazos para besarlo con pasión, a lo que el muchacho correspondió...
La voz de una madura mujer los saca de aquel transe...
- ‘Esta lista la cena! Vamos!’ – Gritaba esta para que los jóvenes salieran al patio...
- ‘Ya vamos!’ – Respondió el ojiazul deparándose de la castaña y girando su cabeza hacia atrás, luego miró a la muchachita que tenia en brazos para sonreírle y susurrarle – ‘Vamos’
La chica sonríe y asiente... Ambos se ponen de pie, se sacuden un poco la tierra que había quedado en sus pantalones y se toman de la mano para salir juntos hacia el jardín... Donde una familia de tres miembros, sin incluirlos a ellos, los esperaban ansiosos para comenzar aquella hermosa velada familiar...
: 23 de Febrero del 2003... :
Un espeso y cálido rayo de sol se filtraba por las pequeñas rendijas de la blanca persiana iluminando el cuerpo tendido de una joven de cabellos castaños, el cual estaba recostado sobre el mullido colchón de una ancha cama de una plaza y cubierto por una fina y blanca sábana
Poco a poco aquellos densos rayos se acercaron al rostro de la joven hasta posarse en sus cerrados ojos... Lentamente estos se abrieron con cuidado y serenidad... Con vaguesa la joven se sentó en su cama para estirar sus brazos desperezándose y dar un gran suspiro en el proceso...
Con una nueva sonrisa adornando su rostro se levantó para así vestirse... Tomó una pequeña remera blanca de mangas cortas y que tapaba hasta su arriba de su ombligo, ajustada... Y un jean bien suelto, azul oscuro, a la cadera, con grandes y anchos bolsillos a los costados...
Se colocó unas blancas zapatillas y bajó a la cocina, donde esperaba, encontrarse con su novio...
Al bajar solo encontró a su familia desayunando, ni rastros de aquel ojiazul que la hacia tan feliz... Preguntó por él... Una gran tensión de hizo presente en el aire, lastimosas expresiones aparecieron en los rostros de ada uno de sus familiares... La miraron y su padre se digno, al ver que nadie lo hacia, a dejar aquel diario que leía y pararse, para ir a hablar con si hija...
- ‘Sucede algo?’ – Preguntó la extrañada castaña al ver a cada uno de los rostros de las tres personas que la acompañaban, mientras su padre la abrazaba por los hombros y la guiaba al comedor...
Hablaron un largo rato, cada letra, cada palabra... Con cada segundo que pasaba la chica sentía como se le iba la vida, un amargo sabor se apoderaba de su boca mientras lágrimas se adueñaban de sus ojos... Sentimientos comenzaron a formarse dentro de ella, mezclándose... Furia, odio, tristura, amor, decepción, traición, muerte...
- ‘D-Dime q-que e-este mentira...’ – Titubeó la joven mientras un temblor se adueñaba de su cuerpo demostrando aquel miedo que llevaba oculto...
: .-.-.-.-.-. :
_____________________________________________Continuará
Kind for the Fan Fic: : Romace / Drama :
Author: :Chibi-Lust :
Disclaimer: : Los personajes de Inu Yasha no me pertenecen : Pertenecen a la gran mangaka Rumiko Takahashi :
Based in: : “Wake me up when septembers ends” : Canción del Grupo : “Geen Day” :
Explanation for the F/F: : - ‘Diálogo’ – :
: ’Pensamientos’ :
: ‘Parte hablada en una sola persona’ :
: (Aclaraciones de la autora dentro de la historia) :
: ‘Palabras que deben resaltar’ :
: .-.-.-.-.-. Indica cambio de escena .-.-.-.-.-. :
Brief introduction: : Año 2003, mes segundo, Febrero, día 20, pleno verano... Inicios de la guerra de Estados Unidos e Irak... Pleno comienzo de las miles de planificaciones militares para atacar a la pequeña república del suroeste de Asia... Principio de aquellos aterradores preparativos... :
: Este es el terrible momento en el que el Fan Fic se posiciona... Supongo que una de las dudas será... “Acaso Miroku y Sango no son japoneses?... Que tienen que ver con Estados Unidos?”... Pues eh aquí la verdadera introducción y la posible respuesta a las diversas preguntas que pueden hacerse luego de leer el fic o antes. :
: “El día 10 de Septiembre de 1996 este par de adolescentes (Sango de 13 años y Miroku de 16) decide declarar sus sentimientos por el otro y así formalizar una relación. Siete años más tarde, el 2 de Febrero del 2003, el padre de Sango es trasladado, por una cuestión de trabajo, a la ciudad Nueva York (New York), Estados Unidos (El trabajo del padre de Sango es el de contador / ejecutivo de una gran empresa... La cual es trasladada a los Estados Unidos de América, y, eh ahí la razón de la mudanza, para ser más explícitos)... Con algo de tristeza la pareja asume su pronta separación. :
: El día del vuelo, Sango encuentra a Miroku esperándola en el aeropuerto junto a algunas maletas, dándole la noticia de que se iría con ella... Ahora, 27 días después, viven felices allí en Nueva York... Para este momento Sango tendría 20 años y Miroku 23” :
: Bueno, esta es una pequeña introducción, ahora, paso a explicar la manera en la que haré el Fan Fic... :
: Este se partirá como en pequeños capítulos iniciando por la fecha en la que transcurre y terminará con una pequeña frase :
: Estos capitulitos (Si así podemos llamarlos) serán muy breves y solo dirán lo más importante del día o el momento más bello de este, no será un día completo ni nada por el estilo, solo un momento :
Apology: : Quisiera disculparme por la notoria diferencia de personalidades o el cambio / modificación que hay en ellas... También por la única participación de Sango y Miroku en el fic, ya que ningún otro personaje interviene en la historia, no de la serie ‘Inu Yasha’ al menos... Solo espero que esto no afecte el resultado de este Fan Fic y que sea de su agrado... :
: También me disculpare si es que la traducción en inglés (La que aparecerá más a bajo, luego del título) esta mal... :
: Sé bien que en ‘Febrero’, en Estados Unidos, es invierno y yo lo hago verano, disculpen esto pero me gustó mucho más esa idea... jeje :
: Por otro lado, en realidad el ataque a las torres gemelas fue efectuado en el año 2001, aún así (por temas de no investigar mejor, confusión, etc.) la historia transcurre en el 2003 :
: Hay un momento referido a "Cumple mes" de Sango y Miroku, si bien su relación en este fic tiene un tiempo más extenso, con ese 'mes' me refiero al tiempo de ellosvivido en EEUU :
: Hay un segmento del video que no he reproducido en el fan fic, "El cumpleaños del muchacho", a decir verdad en el video es muy breve y aqui no sabia como expresar la idea :
: Ahora si, disculpas por todos los incomvenientes y horrores (ya no son errores, jeje ) :
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Amor
.-.-.-.-.-.
: You know that the life is short :
: Don’t import how happen always you have here someone to you :
: I never leave you :
: Wake me up with a kiss when septermber ends... :
.-.-.-.-.-.
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: You know that the life is short :
: Don’t import how happen always you have here someone to you :
: I never leave you :
: Wake me up with a kiss when septermber ends... :
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: 20 de Febrero del 2001... :
Una mañana, en un amplio campo de hierbas verdes cubierto por hermosas y amarillentas margaritas, con árboles distantes, rodeado de frondosas montañas que se disipaban levemente a la lejanía, dejando que el sol lo ilumine con intensidad y calidez en aquel despejado día de cielo azul, dos jóvenes enamorados se encontraban juntos, besándose...
Entre besos y dulces palabras se toman unos segundos, se separan un instante sonrientes, la muchacha, de intensos y brillantes ojos cafés siendo acompañada por un suave y hermoso cabello castaño, se recuesta sobre su acompañante, un joven de ojos azulinos, hermosos y profundos como dos zafiros, de cabellera azabache, suave y delicada, atada con una diminuta coleta blanca...
Ambos, tendidos sobre el mullido y verde césped, contemplaban el paisaje al tiempo que la compañía que el otro le hacía...
- ‘Sabes...?’ – Se anima a decir el joven ojiazul mientras sus ojos brillaban con intensidad observando el amplio y celestino cielo sobre él – ‘...La vida es una sola... Y no dura para siempre, lamentablemente... Vos sabes que la vida es corta’
- ‘Eh?... Que dices?... A que viene eso?’ – Dice la joven girando a ver al azabachado, algo confundida por la repentina oración que el muchacho acababa de pronunciar
- ‘Que quiero estar lo que me quede de vida contigo y con nadie más... Solo... Solo contigo...’ – Agrega el muchacho mirando a la castaña a los ojos, quitándole aquella confusión y otorgándole una sonrisa
- ‘Jajaja’ – Ríe la joven para luego acomodarse, ayudándose con sus manos y piernas para girar, y quedar frente a frente al chico – ‘Pase lo que pase yo siempre estaré contigo, nunca te dejaré’
- ‘Me lo aseguras?’ – Pregunta el joven posando su mentón en el hombro izquierdo de la muchacha para luego suspirar cerrando sus ojos – ‘Dime que sí...’
- ‘Por su puesto, no importa lo que suceda siempre tendrás aquí a alguien para ti, nunca voy a dejarte’ – Dice la castaña separando el rostro del chico de su hombro y depositando un beso en lo labios del joven, este era suave, pacífico e inocente, muy tierno y cálido...
Luego de unos instantes se separa del ojiazul y lo mira a los ojos con una tierna sonrisa en sus labios... Luego de esa breve conversación volvieron a la antigua posición...
Así comenzó a pasar el tiempo, haciendo que el día avance, tranquilo y sereno, cálido y suave... Ahora era de tarde, ambos jóvenes recostados en el gran y rojizo pastizal...
El muchacho recostado de espaldas al sol, con sus ojos cerrados, descansando, sosteniendo a la indefensa castaña en sus brazos, rodeándola con ellos... Esta de espalda al joven, tomaba aquella manos que la rodeaban en las suyas, también con los ojos cerrados... Y el cabello cayendo con densidad y delicadeza por su cuello, cubriéndolo por completo...
- ‘Amor...’ – Pronuncia el chico de ojos azules con pereza luego de un bostezo, para levantar la cabeza densamente y asomar su mirada por los hombros de la joven para ver su rostro...
- ‘Sí...?’ – Pregunta la castaña en el mismo tono de voz adormilada, mientras una densa pero hermosa sonrisa se dibujaba en su rostro
- ‘No crees que ya debemos irnos?... Digo... Dentro de poco comenzará a anochecer...’ – Opina el joven viendo como el sol se ocultaba tras las montañas matizando, poniendo todo aquel bello campo en cálidos tonos de naranjas, rojos y amarillos
La castaña voltea para mirar fijamente a los ojos al ojiazul, en los cual, notó un hermoso brillo anaranjado debido a la caída del sol, su figura era enmarcada débilmente de un claro color naranja, el cual también jugaba en su cabello, comenzaba a oírse a los grillos entonar su conocida melodía... La chica solo sonríe, se empalagaba con aquella visión que tenía enfrente... Todo el fondo de un negro rojizo, con el ojiazul de un anaranjado oscuro delineado con uno más claro, más el intenso brillo naranja en sus ojos el cual resaltaba el color zafiro que estos llevaban...
- ‘Si’ – Susurra, luego se acerca y lo besa, yergue la parte superior de su cuerpo y queda sentada en la hierba, con sus rodillas a un lado sirviéndole de apoyo, mirando al ojiazul... Esperando que se levantara...
El joven suspiro con una sonrisa en el rostro, luego se puso de pie, estirándose, desperezándose... Luego se puso de frente a la castaña extendiéndole la mano derecha...
La muchacha de ojos cafés, tomó la mano del ojiazul, y estirando sus piernas por completo, se pone de pie quedando a centímetros del rostro del joven que estaba frente a ella...
Solo sonríe y susurra con dulzura...
- ‘Te amo...’ – Acercándose a los labios del chico para besarlo con suavidad y ternura, el chico cierra los ojos disfrutando de aquella apacible opresión de labios que la castaña le estaba regalando...
La chica se separa sonriente, dejando ver sus blanquecinos dientes asomarse por sus rosados y delicados labios...
- ‘Yo también te amo... Mucho... Demasiado...’ – Dice el muchacho de ojos de zafiro pasando su brazo por encima de los de la castaña haciendo que esta se pose su cabeza en el hombro de él... Así comienzan a caminar... Juntos...
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: Vos sabes que la vida es corta :
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: 21 de Febrero del 2003... :
Una joven castaña corría, riendo, con una hermosa sonrisa y sus ojos brillosos, un gran semblante...
- ‘Espérame!’ – Suplicaba entre risas un ojiazul que corría tras ella, mirándola expectante...
- ‘Jajaja, corre!’ – Dice la chica volviendo su rostro hacia tras parar mirar el del ojiazul y luego volver a su posición anterior apresurándose tanto como sus pies le permitían – ‘Voy a ganar!’ – Canta victoriosa al ver que la meta se encontraba cerca y que llevaba la delantera
- ‘Lo dudo!’ – Se apresuró a añadir el ojiazul al tiempo que aumentaba la velocidad con la que corría, esforzándose minimamente pero cansándose... Alcanzaba lentamente a la dulce castaña y luego pasa delante de ella
- ‘Que!’ – Fue lo único que salió de los labios de la chica al ver la manera en que su novio la había alcanzado...
El joven mira hacia atrás sin dejar de correr, dedicando una sonrisa a aquella castaña... La chica parpadea... El muchacho se detiene... Acto seguido la joven lo imita...
- ‘Como... Como hiciste?’ – Pregunta sentándose en aquellas grisáceas sillas de la mesa redonda perteneciente a ese bar al aire libre, recuperando el aire, aún sin poder creer que le habían ganado
- ‘Corrí... Como me aconsejaste’ – Responde con una hermosa sonrisa en el rostro tomando asiento
- ‘Que gracioso’ – Dice la muchacha riendo
- ‘Aja, aja’ – Dice el sonriente ojiazul al tiempo que fija su vista en una joven de cabello azulado y ojos grisáceos, que se acercaba a la mesa
- ‘Buenas tardes’ – Saluda la jovencita inclinando su cabeza con levedad ante la pareja allí sentada – ‘Desean ordenar algo?’ – Pregunta con amabilidad
- ‘Mnh... Bueno, yo quisiera un pequeño paquete de papas y una gaseosa’ – Pide el ojiazul con una radiante sonrisa para luego mirar a su castaña – ‘Tu amor...?’
- ‘Yo... Emh... Lo mismo, solo que con agua mineral si se puede’ – Dice la ojicafé mirando a la amable mesera con un leve rubor en las mejillas...
- ‘Muy bien, enseguida se los traigo’ – Pronuncia la joven ojigris con una dulce sonrisa para luego darse la vuelta e ir en dirección al bar
- ‘Mmm... Estas... Sonrojada?’ – pregunta el muchacho e cabellos azabaches una vez que vuelve a fijar su vista en la castaña, dueña de su corazón, y notar que sus mejillas estaban teñidas de un leve color rojo
- ‘Y-Yo?’ – Titubea la joven para luego bajar la mirada y acercar su mano izquierda a su mejilla – ‘Bueno, si, puede ser...’
- ‘Eh, no me asustes...’ – Suplica el chico mientras una incrédula sonrisa se formaba en su rostro pensando lo peor...
- ‘NO!... No es lo que estas pensando!... E-Es solo que me apena un poco hablar frente a alguien que no conozco...’ – Confiesa la chica mientras sus mejillas tonificaban ese rojizo color que las adornaba
- ‘Jajaja’ – Ríe el ojiazul, y luego se arriba a la mesa para poder llegar a la castaña para acariciarle la mejilla y seguir con un tierno beso en sus labios... A lo que la castaña corresponde...
- ‘D-Disculpen...’ – Dice la dudosa voz de una joven, la cual interrumpe a la pareja provocando la rotura de aquel beso deshaciendo el cálido clima – ‘Aquí están sus pedidos...’ – Pronuncia con debilidad mientras sus manos comenzaban a temblar haciendo que la bandeja que llevaban en ellas las imitara
- ‘ Ah, muchas gracias’ – Responde el azabachado volviéndose a su sitio dejando a una apenada castaña con su mirada fija en sus rodillas – ‘No se preocupe, tranquilícese...’ – Pide el ojiazul observando el nerviosismo de la muchacha
- ‘Si, gracias... Disculpe...’ – Ruega la joven quien se reverencia y luego posa la bandeja la bandeja sobre la mesa para después retirarse
Ambos comienzan a almorzar, entre tanto, platicaban y reían... Disfrutaban demasiado estar juntos, era una especie de adicción... La sonrisa del otro, su mirada, su voz... Su calidez... Todo era indispensable... Talvez demasiado...
En cuando terminaron colocaron los restos en la bandeja y la acercaron al bar donde la apoyaron sobre la pequeña barra roja que allí estaba... Pidieron la cuenta y esperaron unos segundo a que se las dieran...
- ‘Entonces...’ – Dice un ojicafé que miraba atenta aquel papel blanco lleno de cortas letras en forma de lista seguidas de números...
- ‘Serían 9, 50’ – Concluye el hombre que atendía la caja
- ‘Muy bien’ – Dice la muchacha sacando dos billetes de dos dólares con tres monedas de 25 centavos... – ‘Aquí esta mi parte señor...’ – Pronuncia extendiendo la mano para entregarle el dinero al hombre frente a ella del otro lado de la barra
- ‘Gracias jovencita’ – Dice el hombre tomando el dinero
Mientras esto sucedía el ojiazul buscaba desesperado su billetera, la castaña y el hombre lo miraban intrigados...
- ‘Sucede algo joven?’ – Preguntó el hombre acercándose a donde el azabachado estaba
- ‘Eh... Bueno... N-No encuentro mi billetera...’ – Dice el muchacho encogiéndose de hombros para esconderse un poco
- ‘Mph...’ – Se quejó el hombre de manera silenciosa mientras fruncía el entrecejo
- ‘Ah... Eh...’ – Pronunció la castaña mientras revolvía nuevamente su bolsillo – ‘Aquí tiene señor, disculpe las molestias’ – Se disculpa con una amplia y tierna sonrisa mientras hacia una pequeña reverencia, el hombre ante esta actitud, le sonríe a la castaña y luego toma el dinero
- ‘No te preocupes, no es nada... Muchas gracias’ – Culmina guardando el dinero en la caja, luego de despedirse la castaña toma al, aún, impactado ojiazul del brazo y comienza a caminar
- ‘Gracias... Perdona por no llevar la billetera...’ – Se disculpa el avergonzado muchacho
- ‘Por mí esta bien’ – Opina la castaña pegando su rostro al hombro del chico – ‘Si es por ti... Por mí esta bien...’
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: En pequeños sollozos mostrare mi tristeza y en grandes sonrisas mi felicidad :
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: En pequeños sollozos mostrare mi tristeza y en grandes sonrisas mi felicidad :
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: 22 de Febrero del 2003 :
Era una noche despejada, al luna brillaba en todo su esplendor iluminando con vaguesa y un claro color azulino todo lo que alcanzaba...
Solo en un patio su brillo no surgía efecto, unas amarillentas y fuertes luces lo iluminaban resaltando todo color vivo que había allí, un lento humo era despedido por la garganta de una ancha parrilla donde abundante carne se asaba...
Las personas allí presentes hablaban animadamente, riendo y alborotando cada palabra que pronunciaban, haciendo a aquel lugar mucho más vivo en la oscura, despejada y tranquila noche...
Mientras esto sucedía dos jóvenes se encontraban dentro, escapando del murmullo...
- ‘Suelta esa cosaaa!...’ – Pedía una aburrida castaña pataleando, mientras su espalda se recostaba en el suelo dejando sus brazos a los lados de este
- ‘Espera, espera! Un nivel más, solo uno más!’ – Decía un adicto ojiazul mientras tecleaba con fuerza los pequeños botoncitos del joystick que llevaba en las manos, acompañando con su cuerpo los movimientos que realizaba el videojuego
- ‘Eso me estás diciendo hace una hora!’ – Responde la harta joven irguiendo su espalda para quedar sentada en el suelo
- ‘Tenme paciencia! Ya va, ya va!’ – Titubea el concentrado azabachado mientras oprimía sus ojos
La castaña suspira con enojo para luego sentarse frente al televisor con decisión y posar su dedo en el botón de encendido/apagado del el televisor
- ‘NO!’ – Grita con desesperación el ojiazul poniendo el juego en pausa – ‘No lo hagas! Por favor no!’ – Suplica extendiendo la mano derecha en dirección a la joven
- ‘Entonces ya basta!’ – Ordena la ojicafé mirándolo fijamente a los ojos
- ‘Emh...’ – Dudaba el ojiazul
- ‘Argh...’ – Refunfuña la joven conteniendo sus nervios, luego se pone de pie y mira al ojiazul, para acaparar sus atención y hacer que este la desvíe del televisor...
En cuanto logra su objetivo, con un ágil maniobra de la mano derecha, oprime el botón de encendido/apagado del televisor...
El ojiazul no nota de inmediato y mira la TV boquiabierto... Luego toma el control remoto, el juego no estaba apagado, por lo tanto seguía funcionando...
En cuanto lo toma en sus manos la castaña se agacha junto a la consola y la apaga, dejando al ojiazul mirándola anonadado... Ella le sonríe con orgullo... El azabachado suspira resignado y luego le sonríe a la castaña...
Camina con las rodillas hasta la dueña de su corazón y la abraza juguetón para luego besarla... A lo que la castaña corresponde con felicidad...
Así comenzaron a embelesarse, mimándose y besándose... Hasta que la muchacha rompe el extasiado beso para mirar al joven a los ojos...
- ‘Creí que me cambiarias por eso...’ – Susurra señalando a la gris y silenciosa consola que estaba en el suelo apoyada...
- ‘Jamás haría eso’ – Responde con dulzura plantando un seco pero tierno beso en los labios de la castaña
Ella solo ríe y luego se acurruca más en el ojiazul rodeando su cuello con sus brazos para besarlo con pasión, a lo que el muchacho correspondió...
La voz de una madura mujer los saca de aquel transe...
- ‘Esta lista la cena! Vamos!’ – Gritaba esta para que los jóvenes salieran al patio...
- ‘Ya vamos!’ – Respondió el ojiazul deparándose de la castaña y girando su cabeza hacia atrás, luego miró a la muchachita que tenia en brazos para sonreírle y susurrarle – ‘Vamos’
La chica sonríe y asiente... Ambos se ponen de pie, se sacuden un poco la tierra que había quedado en sus pantalones y se toman de la mano para salir juntos hacia el jardín... Donde una familia de tres miembros, sin incluirlos a ellos, los esperaban ansiosos para comenzar aquella hermosa velada familiar...
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: No importa lo que suceda siempre tendrás aquí a alguien para ti :
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: No importa lo que suceda siempre tendrás aquí a alguien para ti :
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: 23 de Febrero del 2003... :
Un espeso y cálido rayo de sol se filtraba por las pequeñas rendijas de la blanca persiana iluminando el cuerpo tendido de una joven de cabellos castaños, el cual estaba recostado sobre el mullido colchón de una ancha cama de una plaza y cubierto por una fina y blanca sábana
Poco a poco aquellos densos rayos se acercaron al rostro de la joven hasta posarse en sus cerrados ojos... Lentamente estos se abrieron con cuidado y serenidad... Con vaguesa la joven se sentó en su cama para estirar sus brazos desperezándose y dar un gran suspiro en el proceso...
Con una nueva sonrisa adornando su rostro se levantó para así vestirse... Tomó una pequeña remera blanca de mangas cortas y que tapaba hasta su arriba de su ombligo, ajustada... Y un jean bien suelto, azul oscuro, a la cadera, con grandes y anchos bolsillos a los costados...
Se colocó unas blancas zapatillas y bajó a la cocina, donde esperaba, encontrarse con su novio...
Al bajar solo encontró a su familia desayunando, ni rastros de aquel ojiazul que la hacia tan feliz... Preguntó por él... Una gran tensión de hizo presente en el aire, lastimosas expresiones aparecieron en los rostros de ada uno de sus familiares... La miraron y su padre se digno, al ver que nadie lo hacia, a dejar aquel diario que leía y pararse, para ir a hablar con si hija...
- ‘Sucede algo?’ – Preguntó la extrañada castaña al ver a cada uno de los rostros de las tres personas que la acompañaban, mientras su padre la abrazaba por los hombros y la guiaba al comedor...
Hablaron un largo rato, cada letra, cada palabra... Con cada segundo que pasaba la chica sentía como se le iba la vida, un amargo sabor se apoderaba de su boca mientras lágrimas se adueñaban de sus ojos... Sentimientos comenzaron a formarse dentro de ella, mezclándose... Furia, odio, tristura, amor, decepción, traición, muerte...
- ‘D-Dime q-que e-este mentira...’ – Titubeó la joven mientras un temblor se adueñaba de su cuerpo demostrando aquel miedo que llevaba oculto...
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_____________________________________________Continuará